Cómo potenciar su desarrollo musical
Los niños nacen con una dotación musical valiosísima: voz para cantar, manos para percutir, pies para danzar, oído para percibir, y una parte de su cerebro especialmente diseñada para entender y disfrutar la música, para desarrollar a partir de ella nuestra inteligencia y habilidades sociales y emocionales. La música es inherente al ser humano, somos musicales, necesitamos música para SER.
Para no perder estas capacidades innatas y proporcionarles un óptimo desarrollo, ofrecemos a los nuestros pequeños una educación musical, porque sabemos que la música mejora la psicomotricidad y las conexiones neuronales, nos lleva de viaje por el apasionante mundo de las emociones y refuerza la sensibilidad personal y social.
Nuestro papel como educadores:
- nutrir con buena música en el seno familiar,
- aplaudir su entrega,
- acompañar en los buenos y en los malos momentos sin críticas ni juicios ni comparaciones.
- pedir asesoramiento a especialistas cuando estemos perdidos.
- y ofrecer las opciones musicales y culturales más estimulantes.
